OPTIMIZA TÚ ENTRENAMIENTO Y PIERDE GRASA LOCALIZADA

Fitness Couple Working Out

¡Hola!

Hoy vengo con dos píldoras más que te van a gustar.

No vayamos con más preámbulos y ¡empecemos!

UN DATO CURIOSO

¿Sabías que… en Estados Unidos el 80% de los socios de gimnasio no acude a sus instalaciones?

Y pensarás, claro es lo que pasa con los típicos ofertones. Pagas un año de golpe y al ser tan barato acabas no yendo. Una cosa con mucha lógica eso de regalar dinero…

Y es lo que ocurre en la mayoría de los casos, pero ¿sabes que me parece todavía más curioso?

Que la gran mayoría de la gente que va al gimnasio, va, pero no entrena.

Imagino que tal vez estás pensando que estoy diciendo una tontería, pero párate a pensar.

Mucha gente utiliza el gimnasio para desconectar (alguno incluso para ligar) y eso puede estar muy bien, pero estás perdiendo la oportunidad de entrenar habiendo organizado tu vida para ello o incluso quitándole ese tiempo a familiares o a otros quehaceres.

Y de verdad que no me quiero poner dramático, que ligar puede estar muy bien, pero hoy en día todos vamos a tope y disponemos de poco tiempo. ¿Qué mejor que aprovecharlo?

Ya sabes que el dinero va y viene, pero el tiempo.. el tiempo solo va en una dirección.

Seguro que más de una vez has estado entrenando y tienes ese pensamiento continuo de “hago algo y me voy que ya habré cumplido” y a mi me pasa en todos los entrenamientos.

Es el típico pensamiento que va en tu contra. El que te sabotea y te quiere destruir.El que no quiere que hagas ningún mínimo esfuerzo que pueda hacer que incluso en un futuro inmediato te vaya mejor.

Todos somos conscientes de lo bien que te hace sentir un buen entrenamiento al acabar.

Yo juego a detectar esos pensamientos, a mi me funciona bien así. Y en cuanto lo percibo le doy la vuelta y pienso “pues ahora es el momento de entrenar bien para conseguir eso por lo que he venido”. No estoy aquí solo para favorecer a mi Yo de ahora, sino a mi Yo del presente y del futuro.

De esta manera además de aprovechar mejor el tiempo, también obtendrás resultados. Y cada vez te será más fácil conseguir aquello por lo que luchas.

Relajarse algún día no tiene porque estar mal, pero si empiezas a ser flexible, esa excepción se convierte en la norma. Y jugar con eso es peligroso.

Por eso yo intento ser muy disciplinado, que no obsesionado. Lo digo porque mucha gente cree que si vas a entrenar 4 días y encima de verdad entrenas y encima va y se te ocurre obtener resultados, es que estás obsesionado.

Pero para mí, es simplemente ser responsable y respetarme a mí y a mis decisiones. Porque me quiero mucho y quiero lo mejor para mí.

Mi guerra ahora mismo está en intentar escribir estas entradas de blog. En no caer en la tentación de sentirme un impostor.

Lo primero que oigo en mi cabeza es “¿no sé para qué escribes?, no se te da bien, tres personas lo van a leer y dos te van a criticar por mediocre”.

Sé que escribir no es mi fuerte, pero si en algo soy fuerte, es en ser cabezón y testarudo.
Y ahora esto ya se ha convertido en un reto. Así que se prepare esa vocecilla porque acabo de empezar.

Solo tengo que decirle que he perdido la cuenta de las veces que he escrito y borrado cada párrafo y cada vez me siento mejor.

Volviendo al tema, cuando vayas a entrenar o cuando vayas a cualquier cosa, haz lo que hayas ido a hacer y no te dejes llevar por la pereza, porque solo sales perdiendo tu.

En el caso del entrenamiento debes entender que esto no es un trabajo de músculos. Es un trabajo totalmente mental.

Y es que entrenar fuerza, por todos los beneficios físicos y mentales que tiene, es de personas inteligentes.

UN MITO

SE PUEDE “QUEMAR” GRASA LOCALIZADA

Pues te tengo que empezar diciendo, que esto no es totalmente un mito. O al menos, no es un mito que se haya popularizado a sabiendas de que al final iban a tener cierta parte de razón.

Resulta que siempre hemos oído el típico caso de que para “quemar» la grasa de cierta zona, hay que hacer ejercicios de los músculos que ahí se encuentran al fallo. Es decir, hasta que no se pueda más y sudemos muchísimo.

El ejemplo básico y tradicional es el de que: si quiero perder grasa del abdomen, cuantos más abdominales haga, más se verá la tableta de chocolate.

De forma general, observando el proceso de utilización de la grasa, podemos ver que ésta va desapareciendo poco a poco y las primeras zonas en donde lo hace, es en las zonas distales; extremidades, parte alta del pecho y de la espalda, así como en las piernas.

Hace un tiempo se observó, que tras un protocolo de fuerza más un protocolo de cardio (que no voy a especificar) se podía estimular el proceso de perder grasa localizada.

Sí, es la panacea!

Este no era el proceso por el que se había extendido el mito de que se podía perder grasa localizada trabajando esa misma zona. Por eso podemos decir, que ese mito era un acierto a medias.

Lamentablemente, lo que se pudo observar en esos estudios, es que era prácticamente insignificante la pérdida de grasa y por lo tanto no merece la pena.

Y como en el punto anterior hemos comentado de la importancia del tiempo, es mejor dedicarle tiempo y esfuerzo a protocolos que funcionan y que nos pongan las cosas fáciles.

A modo resumen, deberías quedarte con que la grasa se va perdiendo poco a poco y de las extremidades hacia el centro del cuerpo y que necesitas como norma general crear un déficit calórico para conseguirlo. Muy recomendable utilizar entrenamiento de fuerza y cardio para conseguir llevar ese proceso mejor.

Hasta aquí te puedo contar hoy.
Espero te haya gustado. Y si ha sido así y lo quieres compartir, te dejo el siguiente enlace

Además te puedes suscribir accediendo a este enlace para que te llegue un aviso, pues no sé cuando volveré a subir el siguiente, pero eso sí, no tardaré mucho.

Un saludo

Pedro Espinosa.

¡Prueba una clase Gratuita!